Este 29 de mayo se realizó el acto de inauguración del Centro Universitario 4 en la unidad penitenciaria de Santiago Vázquez (ex Comcar). Este centro se instala en el marco del convenio firmado en 2020 por el Instituto Nacional de Rehabilitación (INR) y la Universidad de la República (Udelar) con el fin de promover la estabilidad y permanencia en la enseñanza universitaria dentro de las unidades de reclusión y así garantizar el derecho a la educación.
La Udelar está presente en la Unidad 4 desde el año 2020, con estudiantes que cursan en las carreras de Psicología, Derecho, Ciencias Económicas y Administración, y Ciencias Sociales. Este nuevo espacio universitario se suma a los inaugurados en las Unidades 6 y 5 en el año 2021. Asimismo, se está construyendo un Centro Universitario en la Unidad 3 y una ampliación en la Unidad 6. Ambas instituciones esperan que estos espacios comiencen a funcionar a la brevedad posible.
El acto de inauguración contó con la presencia del rector de la Udelar, Rodrigo Arim, el actual prorrector de Enseñanza, Juan Cristina; la candidata al Prorrectorado de Enseñanza, Estela Castillo, el decano de la Facultad de Ciencias Económicas y de Administración, Jorge Xavier; integrantes del Equipo de trabajo con estudiantes de la Universidad en privación de libertad de la Udelar; la sub directora Técnica del INR, Lourdes Salinas, así como integrantes del equipo del Programa Educación y Cultura de INR.
«Estudiar es un derecho que la Universidad tiene la obligación de asegurar»
Nelson De María, estudiante de Centro Universitario 4 que actualmente cursa en la Facultad de Ciencias Sociales, ofició de maestro de ceremonia y agradeció a las autoridades de la Universidad y del INR así como a los docentes y estudiantes por su presencia.
Expresó que este centro universitario, el tercero que funciona en el marco del convenio de INR y Udelar, «cobró vida gracias al esfuerzo y el trabajo realizado por los estudiantes que permitieron las mejoras en la infraestructura edilicia y acondicionamiento de este lugar», subrayó.
Posteriormente, el rector Arim remarcó que era «un día de alegría y de reconocimiento a los estudiantes que pusieron a punto este espacio universitario y han hecho esfuerzos para poder generar condiciones mínimamente adecuadas para estudiar». Asimismo, resaltó que esto se logra por el esfuerzo colectivo y gracias a los acuerdos que deben pensarse a mediano y largo plazo. Recordó que «la Universidad de la República tiene como uno de sus principales objetivos asegurar el acceso a la educación terciaria y superior a todas las personas en el territorio nacional que deseen estudiar en ámbitos universitarios». Para el rector esto tiene varios correlatos e implicancias y la más conocida es el desarrollo de la universidad en el interior pero otra es «la necesidad de construir centros universitarios en contextos como lo es el ex-Comcar en este caso en donde no es viable la concurrencia en forma cotidiana de los estudiantes a las Facultades o los Centros Universitarios Regionales». En este sentido, afirmó que estudiar no es un privilegio sino que «estudiar es un derecho que la Universidad tiene la obligación de asegurar».
Explicó que actualmente el esfuerzo que hace la Udelar en las unidades del INR se apoya en recursos contingentes porque no existe una línea específica de trabajo para la privación de libertad sino que se derivan recursos propios de la institución. «Lo hacemos convencidos de que es nuestra obligación», indicó, aunque reconoció que «algunos logros institucionales se transforman en nuevas dificultades». Señaló que hace una década había menos de diez estudiantes en privación de libertad y en 2023 superan los 200 dentro y fuera del circuito universitario, mientras que en la Unidad 4 hay 41 estudiantes en esta situación. «Las ganas de estudiar y de buscar trayectorias formativas en ámbitos universitarios, nos demanda la construcción de opciones eficaces para hacer que este derecho se concrete todos los días», afirmó, porque «hay un esfuerzo de los estudiantes que de alguna manera generan las condiciones para que esto sea posible», valoró. «Inaugurar este centro universitario en el Comcar es muy importante y es una puerta hacia nuevos desafíos que tenemos que ir transcurriendo todos los docentes, las autoridades y los estudiantes», sostuvo. Por último, resaltó que esta no es una actividad más para la Universidad sino que «es una actividad central que sale al encuentro de necesidades objetivas, de ganas de aprender y del compromiso de los estudiantes que han hecho viable esta experiencia». «Tenemos 200 estudiantes y ojalá que en uno o dos años puedan ser 300 o 400 y así seguir avanzando en la construcción del camino de la formación y que esto sea independiente de los contextos específicos que vive el estudiante», concluyó.
Por su parte, Lourdes Salinas recordó que en esta misma Unidad en diciembre de 2020, el INR y la Udelar se comprometieron a llevar adelante un proyecto que se convirtió en un hito en el sistema penitenciario en materia de educación terciaria: «generar un convenio que garantice el derecho al acceso a la educación superior en privación de libertad habla de uno de los principales objetivos de la intervención en cárceles que es brindar las mejores oportunidades para que las personas privadas de libertad tengan las mayores herramientas para poder integrarse cuando logren su libertad», explicó. Con orgullo manifestó que hoy «más de 200 personas privadas de libertad pueden decir que la Udelar también es su casa». A pesar de las dificultades, entiende que «es importante saber que al final del día es esta inauguración la que nos muestra que vamos por buen camino porque el compromiso entre ambas instituciones se mantiene». Adelantó que se va inaugurar la ampliación del espacio universitario en la Unidad 6 porque ha habido una alta demanda de estudiantes; esta ampliación es el preludio de la creación del centro educativo de la Udelar que va a quedar en forma permanente. También indicó que se está proyectando el espacio de la Udelar en la unidad 3. «Es muy significativo que la Udelar traspase los muros de la cárcel de máxima seguridad de nuestro país y se pueda instalar de forma permanente», resaltó.
Asimismo, desde el INR entienden que los espacios educativos deben ir de la mano de alojamientos que permitan que las personas privadas de libertad puedan estudiar en un ambiente adecuado, indicó. Además, reconoció a todos los estudiantes que ayudaron y acompañaron para que este espacio hoy sea posible, destacó el trabajo de los docentes y equipo de la Udelar, de los Departamentos de educación y cultura y las Direcciones técnicas de las Unidades que integran el circuito universitario.
Rol activo de los estudiantes
Por último, Michael Medina, que habló en representación de los estudiantes, resaltó que esta inauguración es «un avance en materia de garantía de derechos porque significa generar estructura y condiciones mínimas para que el estudiante pueda continuar sus estudios superiores». Agradeció especialmente a los estudiantes porque son quienes continuamente están empujando contra las dificultades que se presentan para estudiar en contexto de encierro y siempre «se le está buscando la vuelta para salir de situaciones complejas, poder adaptarse y poder construir para aceptar otros desafíos y poder seguir desde acá».
«Hemos tomado un lugar que creemos necesario», agregó: «esperando que las instituciones vengan, dejar la espera pasiva y tomar un rol de responsabilización de nuestro propio rol de estudiantes para exigir, no desde la queja, sino desde la participación», aseguró. Por eso, no sólo están buscando mantener la infraestructura edilicia y cuidar este espacio, señaló, sino que también auguran «que se pueda caminar hacia un programa integral de la Universidad en privación de libertad». Explicó que los estudiantes saben que la enseñanza ha sido una de las últimas funciones incorporadas a los temas de privación de libertad porque ya se ha investigado sobre este tema y se ha trabajado en extensión, «creemos que es importante la integración y desarrollo de las funciones y que desde acá podemos producir conocimiento».
«Hemos recorrido un camino que no ha sido fácil pero seguimos insistiendo que se pueda escuchar la voz del estudiante, que el estudiante pueda responsabilizarse y participar, por eso insistimos en generar ese espacio de voz y pensar juntos para construir», explicó. Por eso, contó que junto a Nelson Di María se incorporó en los espacios de cogobierno de la Facultad de Ciencias Sociales. Por último, emocionado resaltó su compromiso con el espacio y valoró que «las instituciones las hacen las personas por eso es muy importante que hoy estemos acá juntos para seguir desarrollando la educación en cárceles como garantía de derechos. Gracias a los estudiantes que le han metido un montón y lo van a seguir haciendo».
Cerraron con la música de la banda Los Monos de R Darwin integrada por varios estudiantes en privación de libertad e interpretaron el tema Perfil de Egreso de Gerardo Dorado.
Inauguración del Centro Universitario de la Unidad 4 del INR. 29/05/2023. Fotos: Liroy Rodríguez, UCUR
Fuente Portal Udelar disponible Aquí