La nueva huerta del Campus Luisi Janicki: pioneras universitarias (CLJ) tuvo como primera actividad abierta un encuentro entre las niñas y niños que asisten al Centro de Recreación y Cuidados con sus padres y madres, que compartieron tareas de acondicionamiento del lugar elegido para plantar.
El proceso para decidir el espacio donde se encuentra la huerta comenzó con un breve documento que realizó el Centro de Recreación y Cuidados junto al colectivo agroecológico “Las gurisas”, que se encarga de llevar adelante el taller “Agroecología al cuidado de la vida” junto a los niños y niñas.
Gabriela Veras Iglesias, coordinadora del Centro, comentó que durante el proceso de selección del lugar para la huerta, se evaluaron ventajas y desventajas técnicas y de accesibilidad de algunos espacios en el Campus. Luego, en conjunto con la Intendencia y la Gobernanza del CLJ se colaboró para decidir que la ubicación del espacio sea entre la cancha de fútbol y el antiguo Hospital Veterinario y para que tenga acceso a agua.
Señaló que el jueves 1° de febrero se realizaron las primeras actividades de instalación del espacio, que conllevaron la planificación y el diseño de los canteros. Ya con esas definiciones, el jueves 8 de febrero se hizo la primera jornada abierta para que adultos y adultas familiares de los niños y niñas participaran del taller.
En ese sentido, explicó que el apoyo de los adultos y adultas fue necesario porque las tareas de la instancia requerían “una fuerza importante”. Además, destacó el apoyo del equipo de mantenimiento del Campus, que “con muy buena voluntad, nos dejó armados tres canteros de madera”.
“Vinimos con las y los gurises y las familias para preparar la tierra, rellenar de compost y pintar los canteros”, indicó. Agregó que durante la actividad se armaron pequeños sobres con un «mix de semillas» para regalar a las y los participantes, con el objetivo de incentivar la práctica de cultivo en los hogares.
A continuación, contó que ya se sembraron algunas plantas y que las próximas sesiones de los talleres se van a trasplantar otras. Por otra parte, contó que el compost que utilizan proviene de la planta de Tratamiento de Residuos Orgánicos (Tresor), que donó cuatro metros cúbicos de compost.
“En síntesis, la jornada consistió en acondicionar los canteros, que las familias conocieran el espacio, que es abierto en el Campus, e ir proyectando la huerta pensando el plan de riego, que hay que planificarlo para una siguiente jornada”, concluyó Veras Iglesias.
